Soul of music.


MusicPlaylistView Profile
Create a playlist at MixPod.com
astrid.rhys.jones@hotmail.com

sábado, 6 de marzo de 2010

UN REGALO


Me gusta disfrazarme. Al igual que a muchos les gusta disfrazarse de monstruos, yo me disfrazo de mi monstruo particular, vamos, de mi parte de princesa. No se trata de vestir o maquillarse, se trata de actuar. Sí, porque me visto como muchas princesas y me maquillo, pero no lo soy. Y la gente lo sabe. Cuando va mas allá de la simple primera vista, claro. Entonces me pueden llegar a conocer (nunca más de la mitad, no nos engañemos) y ver que de princesa tengo bien poco. Pero hoy me disfrazo, hoy actúo de princesita. ¿Por qué? Un regalo. ¿Para quién? No es relevante. Eso sí, despues del show vuelvo a ser yo. Y río, y río, y vuelvo a reir. Y digo toda clase de tonterias, y hago lo que se me antoja en cada momento.

Y es que yo, disfrazada o no, soy así.

0 comentarios:

Retazos de una vida pasada, pero no por ello menos válido.

Que no te engañen. No existen los cuentos de hadas, las princesas viven en cuentos de terror. Cuentos donde nadie dice lo que piensa, ni hace lo que desea; sino lo que se supone que tiene que decir y hacer. Allí, los vestidos y zapatos son incómodos, no dejan correr; ni vivir en realidad. Los príncipes no son tan buenos y no protegen, solo aprisionan y ahogan. Los dragones a su lado son una bendición, y es que por lo menos a esos puedes odiarlos. Porque el problema comienza cuando quien amas es quien te está matando por dentro.