Soul of music.


MusicPlaylistView Profile
Create a playlist at MixPod.com
astrid.rhys.jones@hotmail.com

jueves, 5 de enero de 2012

No Astrid, ése no.

Hoy le he pasado un par de folios emborronados con tinta y sentimientos a Bucay. Escritos por mí, por si hacía falta aclararlo. Ha empezado a leer, y me ha mirado con esa cara de "no Astrid, ése no"; con lo que rápidamente he apuntado que lo había escrito hace mucho, que no pensara mal, como diciéndole: "por dios, cuando lo escribí ni lo conocía". Já. 

Pero lo he dicho presurosa, tanto que ni yo me lo creo. La verdad es que no sé en qué momento lo escribí, una carta triste, una carta triste a un hombre. Pero ¿a quién? En realidad creo que a ninguno y a todos al mismo tiempo, al fin y al cabo al releerlo me han venido muchas imágenes a la cabeza. Muchas y muy diferentes. Como si todos los sentimientos plasmados tuviera que ingerirlos, procesarlos y sufrirlos ahora de golpe. Extraña carta, tanto como yo.

0 comentarios:

Retazos de una vida pasada, pero no por ello menos válido.

Que no te engañen. No existen los cuentos de hadas, las princesas viven en cuentos de terror. Cuentos donde nadie dice lo que piensa, ni hace lo que desea; sino lo que se supone que tiene que decir y hacer. Allí, los vestidos y zapatos son incómodos, no dejan correr; ni vivir en realidad. Los príncipes no son tan buenos y no protegen, solo aprisionan y ahogan. Los dragones a su lado son una bendición, y es que por lo menos a esos puedes odiarlos. Porque el problema comienza cuando quien amas es quien te está matando por dentro.