Soul of music.


MusicPlaylistView Profile
Create a playlist at MixPod.com
astrid.rhys.jones@hotmail.com

lunes, 31 de mayo de 2010

Yo nunca...

El sol pega fuerte, como gatibu en la guitarra y el micro. La gente se arremolina a su alrededor bailando y gritando. Aunque no son los protagonistas del día, por lo menos no en el corazón de Abi. Ella está sentada, a su lado Imanol. Imposible, intocable, su amor perdido; piensa.

"Yo nunca me he emborrachado", "Yo nunca ligaría en un bar",... Los "Yo nunca" se suceden y la gente de acuerdo con la afirmación no bebe... o bebe confesándose culpable.

Unos acordes se elevan en el aire. Quién no los conoce, es la entrada de "Musturrek sartunde". La multitud enloquece y canta a pulmón, y dentro de Imanol algo también enloquece. Le grita y le canta en su interior, su corazón se acelera, no puede negar lo evidente...

"Soro moduueen maitatu gineen, ta gozatzen heldu zan goizaa..."

La canción termina. Pero no eso que le retumba dentro; joder, la ama y lo sabe. Quizás sea una señal, quizás ya sea hora; hora de confesar, de dejar atrás el pasado y mirar por ese futuro... un futuro que no quiere que exista si no es con ella.

Le toca. Se inclina hacia Abi y ella se estremece. Le susurra al oído:

"Yo nunca volvería en estos momentos contigo", y se lleva el vaso a los labios.

A veces son dos palabras. A veces una caricia. A veces un beso. Y en otras, una canción, un juego susurrado y un trago. Pero lo que sí es siempre, es amor. Amor del verdadero.

0 comentarios:

Retazos de una vida pasada, pero no por ello menos válido.

Que no te engañen. No existen los cuentos de hadas, las princesas viven en cuentos de terror. Cuentos donde nadie dice lo que piensa, ni hace lo que desea; sino lo que se supone que tiene que decir y hacer. Allí, los vestidos y zapatos son incómodos, no dejan correr; ni vivir en realidad. Los príncipes no son tan buenos y no protegen, solo aprisionan y ahogan. Los dragones a su lado son una bendición, y es que por lo menos a esos puedes odiarlos. Porque el problema comienza cuando quien amas es quien te está matando por dentro.